Innovar para superar la crisis hídrica
Parece una ironía hablar de crisis hídrica en estos días, pero lo cierto es que a pesar de las fuertes y sorpresivas lluvias, más de un millón de personas no tienen acceso formal a agua potable en Chile. Esta realidad es aún más preocupante cuando constatamos que las comunas más carentes son también las que presentan mayor inequidad social.
El 47,2% de las viviendas rurales, es decir, 324.216 hogares, no cuenta con acceso formal a agua potable. Su abastecimiento depende en un 84,7% de pozos o ríos, es decir, fuentes naturales que en el último tiempo han disminuido su caudal o han desaparecido por completo. Esto significa que estas familias obtienen abastecimiento de agua por medio de camiones aljibe, que muchas veces solo entregan 50 litros por persona al día, la mitad de lo recomendado por la OMS y de lo que se consume en una ducha de cinco minutos.
Los números van creciendo año tras año y como país no hemos sido capaces de enfrentar esta situación e incorporar innovación como herramienta central en las políticas públicas para solucionar esta grave crisis hídrica. El Fondo Innova Agua, iniciativa que desarrollamos en Fundación Amulén junto al apoyo de Coca-Cola Chile y AB InBev, es un ejemplo de cómo implementar alternativas efectivas con innovación. Existen comunidades en Chile que llevan más de 30 años esperando una solución y, con estos proyectos, las personas beneficiadas tendrán agua de calidad en seis meses, gracias a la tecnología y la colaboración de distintos actores. Hace pocos días se definieron las cuatro comunidades ganadoras –Colina, La Ligua, Empedrado y Licantén–, localidades en las cuales se comenzarán a implementar tecnologías como agua del aire, potabilización de agua y captura de agua lluvia, que sin duda cambiarán la calidad de vida de más de 620 personas. Este fondo, que seguiremos desarrollando, es una tremenda oportunidad para las municipalidades y, al mismo tiempo, una instancia para visibilizar este tipo de soluciones y sus enormes ventajas.
Es tiempo de ser propositivos y ser capaces como país de incorporar experiencias exitosas que den soluciones definitivas a las comunas que no pueden seguir esperando. Pobreza y carencia de agua tienen una correlación directa. No podemos seguir haciendo más de lo mismo. Es tiempo de innovar.
Jorge Matte, Presidente Fundación Amulén